No pierdas la fe.

Una chica de un pequeño pueblo, que vivía en un mundo solitario, tomó el tren de medianoche a cualquier parte. Un chico de ciudad, nacido y criado al sur de Detroit, tomó el tren de medianoche a cualquier parte. Un cantante en una sala llena de humo, olor a vino y perfume barato. Por una sonrisa, pueden compartir la noche. Desconocidos esperan paseando por el bulevar. Sus sombras buscan en la noche. Personas bajo las farolas viven en busca de emociones, ocultándose en la noche. No pierdas la fe, aférrate a ese sentimiento. Personas bajo las farolas. No pierdas la fe.