¿Y qué le hago?

-¿Qué pasa?
-Volví a discutir con ella.
-¿Otra vez? Ya tardabais. ¿Qué ha pasado?
-Le conté que tenía pensado acostarme con una amiga y se ha molestado, entonces yo me he cabreado.
-Es que tú también tienes buenos cojones, ¿por qué se lo has dicho si sabes que le gustas?
-Porque debería darle igual, no podemos estar juntos. Soy libre de hacer lo que quiera, de liarme con la que quiera y ella lo sabe.
-¿No lo entiendes? Ella espera que no lo hagas, que pienses en ella y en sus sentimientos.
-Ya pienso en ella, pero soy así. Cuando estoy soltero por muchas tías que tenga detrás hago lo que me de la gana hasta que decida sentar la cabeza.
-Ahí está el problema: ni siquiera lo intentas. Te has acostumbrado a esa forma de vida y como te gusta, te sientes cómodo no quieres salir de ahí.
-Cada uno es como es.
-¿Por qué no te paras a pensar en como debe sentirse ella y lo intentas?
-No.
-Eres un autentico cabezota.
-¿Y qué le hago...?


Mientras, en otro lugar, la misma hora, la misma conversación.


+¿Qué pasa?
+Hemos vuelto a discutir...
+¿Y eso?
+Me contó algo que me molestó... le di a entender mi malestar y se enfadó conmigo... ahora me habla borde.
+De verdad... Tíos...
+Creo que no lo entiende... No entiende que me gusta demasiado y que me hace daño, tanto cuando me dice eso como cuando se enfada conmigo...
+En mi opinión deberías pasar del tema y de él, lo único que conseguirás es ponerte peor.
+No puedo pasar de él... No es tan fácil hacerlo de la noche a la mañana...
+Deberías intentarlo... Si no se fija en lo mal que te pones cuando te dice cosas que no quieres oír o que haga es que no te merece, vales mucho.
+Es que luego es otro... Es súper cariñoso y atento.
+El chico de las mil caras.
+Tengo muchas ganas de llorar.
+Ni se te ocurra llorar y mucho menos por él, no se lo merece. Si lloras le estarás dando el gusto de sentirse superior y de que piense que tú siempre estarás ahí. Ni se te ocurra. Empieza a pensar en ti y en lo que te hace bien... Empieza por olvidarlo.
+No puedo hacer eso.
+Si no lo intentas nunca lo sabrás.
+¿Y qué le hago...?