Estábamos nerviosos porque era la primera vez que íbamos y no sabíamos que era lo que nos encontraríamos. Al llegar al convento e instalarnos allí bajamos para buscar un lugar donde cenar, me acuerdo muy bien que al salir a recepción nos encontramos a otro grupo. Todos nos preguntábamos ¿de dónde vendrán? Después nos enteramos de que eran nuestros amigos de Madrid!
Al día siguiente empezaron todas las presentaciónes y poco a poco fuimos ganando amigos, pero cuando los fuimos conociendo fue en la excursión por Barcelona, ¡preciosa! por cierto.
El último día, nosotros fuimos los primeros en marcharnos y en seguida nos intercambiamos los tuentis para seguir en contacto, y así ha sido. Un año después-que rápido pasa el tiempo-seguimos manteniendo el contacto. Al menos por mi parte, y más con los madrileños!
Parece una tontería, pero yo echo de menos a unos cuantos y me gustaría volver a verles, y repetir esa maravillosa experiencia que nos unió, pero por ahora nos tendremos que conformar con el tuenti jajaja.
Barcelona, espero volver a verte, a ti y a esas personas que gracias a ti pude conocer.
Os quiero!
No hay comentarios:
Publicar un comentario